Del lago Titicaca hemos visitado 2 ciudades, Puno (Perú) y Copacabana (Bolivia), tanto una ciudad como la otra, no ofrecen mucha cosa.
En Puno hicimos únicamente una excursión, en la que visitamos las islas flotantes de los Uros y Taquile. De la primera parada podemos explicar que es un circo en todos los sentidos, el turismo las ha convertido en una atracción con números musicales incluidos, donde toda la familia canta y hace coreografías de canciones conocidas como por ejemplo el "vamos a la playa" y otros hits de los 80's...
Sacando la parte "folclórica" de la situación, es interesante ver como se han adaptado al medio. La base de las islas flotantes de los Uros están construidas con raices de totora, una especie de "caña" autóctona de la zona, que se compacta y hace como un efecto de corcho. Sobre esta base de raices, depositan las ramas de totora. Es un trabajo constante, ya que cada cierto tiempo tienen que ir depositando nuevas capas para que no se hunda. Estas islas tienen que ser ancladas para que no se vayan durante los temporales.
Sacando la parte "folclórica" de la situación, es interesante ver como se han adaptado al medio. La base de las islas flotantes de los Uros están construidas con raices de totora, una especie de "caña" autóctona de la zona, que se compacta y hace como un efecto de corcho. Sobre esta base de raices, depositan las ramas de totora. Es un trabajo constante, ya que cada cierto tiempo tienen que ir depositando nuevas capas para que no se hunda. Estas islas tienen que ser ancladas para que no se vayan durante los temporales.
Nos sorprendió la forma en la que viven, las islas funcionan como familias, es decir, cada isla tiene un presidente (un jefe de familia), que es el que pacta los precios y da permiso para que sean visitadas. Aunque les han puesto un hospital y una escuela, cada vez pierden más población, ya que el contacto con los turistas les hace ver que hay más mundo fuera del lago. Igualmente merece la pena la visita, aunque choque el "sayonara baby" con el que nos despidieron.
En cuanto a Taquile podemos hablar poco, por una serie de circunstancias denominada "homo getus guia", sólo pudimos visitar 2 tiendas de souvenirs y un restaurante, por supuesto que todo ello pactado con la consiguiente comisión que se llevaría... Una lástima... Le preguntamos a la guía de otro grupo por la "extraña" vestimenta que llevaban los hombres (extraña para la zona, medio familiar para nosotros), y la contestación fue que el antiguo "dueño" de la isla, el conde Pedro Gonzáles de Taquila (de ahí el nombre de la isla) de origen catalán, prohibió a los habitantes a que llevaran indumentaria inca y les obligó a adoptar la que sale en la fotografía, ¿no os resulta parecido al vestido tradicional catalán?
De Puno destacaríamos también el alojamiento, desde luego que si tuvieramos que volver por alguna extraña circunstancia a esta ciudad, repetiríamos en el Inka's Rest comandado por Alfredo y Gilda. Alfredo es una persona honesta y de fiar, y en una ciudad tan insegura como es Puno se agradece encontrarse con alguien así. Nos permitimos también añadir fotos del alojamiento, nuestra habitación era en realidad un apartamento!! Con tv plana por cable, dvd, ordenador de sobremesa, wifi, servicio de buffet con bebidas calientes, caramelos, agua caliente, desayuno... en fin, todo una maravilla por 16'5€ la noche.
A 8 km antes de llegar a Copacabana esta la frontera, donde te hacen bajar del autocar para certificar tu salida de Perú y caminar unos 100 metros hasta el punto de control de Bolivia. Vamos a explicar 2 anécdotas sobre este trámite fronterizo, la primera... poco antes de bajar en el punto de control de Perú, un señor "muy amable" de la compañia de bus, nos aconseja que si tenemos moneda peruana, la cambiemos antes de cruzar la frontera, ya que en Bolivia el cambio es inferior, curiosamente el bus para delante de una oficina de cambio, todo el pasaje fue de cabeza a cambiar soles por bolivianos, el cambio estaba a 2,3. Bien... después de recorrer unos 100 metros y estar en suelo boliviano, nosotros que somos desconfiados y que no habíamos cambiado moneda antes, preguntamos a cuanto esta el cambio en Bolivia, sorpresa... a 2,45!!! Fíate del "homo getus amable" de la compañia de bus que seguro se llevó comisión.
La segunda anécdota es la de los señores que te certifican la entrada en el pais, espectacular, te imaginas que sea gente pulcra, educada y como mínimo vestida con uniforme, pues nada de eso!!! El que nos selló el pasaporte iba con bambas (zapatillas deportivas), chandal, barba de 3-4 días, y cigarrito en la mano! No comments!
En cuanto a Copacabana la descripción más acertada es la que nos dijeron Albert y Josep, ellos la describieron como un pequeño Benidorm. Es una ciudad encarada al turismo al estilo boliviano, hay muchos restaurantes, alojamientos, agencias de viajes, tiendas de souvenirs...
Allí conocimos también a Joan, un ex electricista de Vilaseca (Tarragona), que lo vendió todo en Catalunya y ha pasado a ser el propietario de un hotel en Copacabana. Nos decía que no cambiaría por nada su situación actual, de ser empleado "de" a ser dueño "de".
La excursión que contratamos fué a la Isla del Sol, desde allí hicimos un trekking de 3 horas y media recorriéndola desde la parte norte hasta la sur. No sin antes pagar los 3 peajes que hay en el camino... uno de 10 bobs, otro de 5 y otro más de 5, ya que la isla la habitan 3 comunidades diferentes, y cada parte quiere tajada del turista. Nuestra primera impresión es que Bolivia no esta preparada para el turismo, abusan de él, espero que esta impresión cambie a medida que visitemos otras ciudades, pero de entrada es muy diferente a Perú.
El trekking vale la pena, hay momentos únicos con vistas espectaculares, alcanzando una altura máxima de 4.060 metros, por lo que algunas partes son algo más duras, sobre todo la última, donde no se acaba el descenso. Hay gente que opta por dormir en la Isla del Sol, en nuestro caso no lo hicimos, pero pensándolo bien, hubiera sido una buena opción, ya que es un lugar tranquilo, consejo para quien lo quiera hacer, llevar agua desde Copacabana, los precios son bastante elevados en todo.
"Lombard street" Boliviana |
Que curioso lo de las islas. A mi me daria miedo vivir ahí, teniendo que recomponerlas cada 2x 3. Bueno, como a todo,me imagino que te debes acostumbrar, pero da sensación de inseguridad.
ResponderEliminarOs encontrais catalanes por todas partes, hay que ver...
Bstos.
Titicaca jijijiji! En santaco hay el río besikaka!Anónimo iban... Jiji!
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