lunes, 7 de mayo de 2012

De Sydney a Surfers Paradise


Nuestra siguiente aventura empieza en el aeropuerto de Sydney, allí fue donde tuvimos (Ro y Da) que ir a buscar  la "enoooooorme" motorhome (caravana). Para llegar hasta la casa de alquiler tuvimos que tomar primero un tren desde el centro de la ciudad hasta el aeopuerto y luego un taxi, porque haber cogido directamente un taxi desde el hostel nos hubiera salido bastante más caro.

Victor, Ro, Sheila, Da y Cipri

Una vez en la casa de alquiler Britz, nos pusieron un dvd de unos 30 minutos donde nos explicaban “más o menos” el funcionamiento de todo el equipamiento que llevaba ese trasto. Después fue cuando vino la sorpresa... Habíamos hecho la reserva por internet y escogimos la opción más económica… sin fijarnos en la letra pequeña (si, ya… a estas alturas todavía nos meten algún gol… grrrrrr!!!) que decía que teníamos que dejar un depósito de 7.500 $ australianos (5.922 € apróx.) en efectivo o en tarjeta de crédito (todo un detalle que lo pudieras dejar con VISA)!!! como franquicia en caso de siniestro, si no tenías ningún altercado, te devolvían todo el dinero.

Evidentemente no teníamos ni ese dinero en efectivo, ni nuestra tarjeta de crédito podía soportar un cargo de esa cantidad, sin haber avisado al menos con dos o tres días de antelación a nuestra entidad financiera. Por lo que tuvimos que pagar el seguro e incrementar algo más el precio de lo que teníamos previsto, no sin antes vivir algunos momentos de “ bastante tensión”, porque al Da le bloquearon sin querer la tarjeta de crédito desde la casa de alquiler dos veces seguidas!!!… aunque más tarde se pudo solucionar llamando por Skype al teléfono de atención 24 horas que figura detrás de la tarjeta.

Una vez solucionados todos los problemas, por fin podíamos disponer de nuestro medio de transporte y casa a la vez para los próximos 13 días!!! Así que la Ro se puso al mando de la Britz y entonando la canción de “Yo para ser feliz quiero un camión” de Loquillo nos metimos en medio de Sydney en busca del resto de la tropa.


Cuando vieron esta especie de "trailer", se quedaron parados porque tampoco se la imaginaban así. Después de varios “ohhhh, me la imaginaba más pequeña”, metimos las maletas de cualquier manera y  más tarde, en la primera parada, organizamos mejor el equipaje. Como íbamos a hacer muchos descansos en la conducción, el baño no se utilizaría, por lo que su función sería de armario trastero para mochilas (craso error...)

La primera parada para dormir la teníamos programada en Coffs Harbour, pero debido al contratiempo del famoso depósito de casi 6.000 €, no pudimos llegar. Ese día fue complicado y para que os hagáis una idea, comimos en un tailandés a las 17:00 (horario Titi)!!!. Después fuimos a comprar a un supermercado llamado BI-LO (que pertenece al grupo Coles) todos los víveres necesarios para los siguientes días y….. ya era de noche!!! En esa zona no había ningún Holiday Park (camping), por lo que tocó dormir en un área de descanso. Resultó ser bastante básica y rudimentaria, justo lo necesario para salir del paso.

Interior de la caravana
Interior de la caravana

Al día siguiente nos levantamos con el ensordecedor ruido de la naturaleza, es decir, con todo tipo de cantos de pájaros. Fue una sensación de libertad que nos recordó a algunos amaneceres en tierras de Nueva Zelanda, pero que para el resto del grupo era nuevo.

Primer desayuno
En la carretera vimos las primeras señales de tráfico advirtiendo la presencia de animales, pero no las típicas señales de “vaca” que conocemos, estas eran de canguros y koalas (koala? Mira que le gusta esta palabra al padre del Da), lo que ya nos hacía ver que estábamos en un sitio muy diferente al que conocemos.

Atención: Canguros!!!
Atención: Koalas!!!














Al cabo de unos cuantos kilómetros decidimos parar a comer, esta sería nuestra primera comida en ruta. Al acercarnos a las mesas de un área de servicio, vimos que se cruzaba ante nosotros un enorme lagarto, al que Victor reconoció como un varanogracias a los documentales de la 2 (ups, ya conocemos a uno que los ve!!!). El animal campaba a sus anchas y no era para nada tímido, os imaginais encontraros este lagarto en un área de descanso de cualquiera de nuestras autopistas? Yo saldría corriendo en dirección contraria, pero como estábamos en Australia... fuimos todos corriendo hacía él con la cámara de fotos en la mano!!!

Varano

Llegamos a Coffs Harbour al atardecer, allí nos instalamos en el camping Park Beach, una opción muy recomendable por precio, instalaciones y ubicación. Justo al lado había una playa donde estaban realizando pruebas para los lifeguard (socorristas) como se les conoce en Australia. Eran bastante duras y exigentes y las repetían una y otra vez…

Playa de Coffs Harbour

Por la tarde reemprendimos la marcha de lo que sería un día para recordar.. Durante el camino tuvimos un primer pequeño momento de “pánico” con la gasolina (mira que dijimos que no nos volvería a pasar lo de Nueva Zelanda… pues sí, volvió a pasar, ay mare!). Desde el momento en que el indicador del depósito marcaba la mitad, este descendió a una velocidad de vértigo hasta entrar en reserva… y el problema se agravó cuando leimos en un cartel “no fuel 100 km.". Durante el momento de la lectura se oyó 3 o 4 veces seguidas el ya famoso “ay mare” de la Ro, seguido del más absoluto silencio… Pensando en positivo, el Da esta vez no empujaría sólo…

Por suerte, el famoso “cartelito” resultó ser una broma de muy mal gusto de algún graciosillo, y coincidió con nosotros siendo nuevos en la zona y encima estando en reserva. Encontramos una gasolinera relativamente cerca y respiramos. Aunque a nosotros ya nos ha pasado dos veces, repetimos que se tenga extremo cuidado en repostar un vehículo de este tipo, ya que no sabemos por qué extraña razón, la aguja del marcador de gasolina baja en picado a partir de medio depósito, por lo que no puedes calcular a ciencia cierta lo que realmente te queda, a eso hay que añadirle que tanto en Nueva Zelanda como en Australia no encuentras gasolineras con la misma facilidad que las puedes encontrar en Europa.

Repostando gasolina

Para continuar con este “glorioso” día, al repostar vimos que habíamos dejado un rastro de agua  en la carretera, nos comenzamos a preguntar de dónde era. Luego vimos que era del desagüe exterior de nuestra caravana… entramos y chequeamos los niveles de agua y… sorpresa, vacío del todo… no nos lo podíamos creer, habíamos perdido 100 litros de agua por el camino (dejando rastro como Pulgarcito con las migas de pan), ya que la noche anterior lo habíamos llenado por completo, bien… ahora el problema estaba en averiguar por qué se había perdido todo el agua. Después de un buen rato de mirar por todos sitios, a alguien se le ocurrió la brillante idea de mirar dentro del baño y… otra vez sorpresa!!! Aquello parecía un jacuzzi, había agua por todos sitios… no se sabe todavía por qué extraña razón se abrió el grifo de la ducha y se vertieron los 100 litros de agua sobre las mochilas del Cipri y la Ro… (ay mare, dijimos todos al unísono)… Nos mirábamos unos a otros aguantándonos la risa, hasta que ya no pudimos más y explotamos a carcajadas. Qué más nos podía pasar?

Evidentemente estaba todo empapado, por lo que una vez solucionado el tema gasolina, se presentaba otro nuevo reto, buscar un camping para poder tender la ropa y rellenar los depósitos de agua. Así que miramos el mapa y vimos que la localidad más cercana era Brunswick Heads, un pueblecito pequeño y costero al que teníamos que llegar pronto porque se estaba haciendo de noche.

Llegamos sin más novedades y ligeritos de peso alrededor de las 19:30. Localizamos dos campings y fuimos directos a ellos, peeeeeero las recepciones habían cerrado y bajado la barrera de acceso a las 19:00. Únicamente podías entrar si tenías el código o la llave para poder abrir la barrera. Todo el mundo se imaginará la frase que soltó la Ro… Buscamos a personal de seguridad de los campings para explicar nuestra situación, pero nada, no aparecieron. Llegamos a ir a una comisaría de policía y decirles lo que nos había ocurrido para que ellos nos pudieran aconsejar a donde ir, ya que no podíamos aparcar ese trasto tan grande por el pueblo porque estaba prohibido y nos podían multar. Pero se limitaron a indicarnos un área de descanso situada a varios kilómetros fuera del pueblo… imposible llegar de noche y más imposible secar la ropa ahí.

Así que tuvimos que hacer un pequeño briefing y coordinar nuestros próximos movimientos. Buscamos un lugar discreto para pasar la noche cerca de un camping, redactamos un escrito donde explicábamos que el conductor se encontraba mal y no podíamos continuar viaje y que queríamos pasar noche en el camping pero que habíamos llegado más tarde de las 19:00 y estaba todo cerrado, también les explicábamos que pasaríamos la noche cerca y que al día siguiente volveríamos. Esta nota la dejamos debajo de la puerta de recepción, de esta forma si nos sorprendía la policia por la noche durmiendo en la ciudad, teníamos una explicación de por qué estábamos aparcados en la calle.

La maliciosa y la mala

Después el Cirpi y el Da cogieron toda la ropa mojada en un cubo y se infiltraron en el camping en busca de los tendederos, y como si fuera lo más normal del mundo a las 21:00 ocuparon cerca de 10 cuerdas con toda la ropa mojada. Mientras el resto iba preparando la cena. Se hizo todo como una operación militar y el resultado final fue óptimo, como díria Hannibal Smith "me encanta que los planes salgan bien".

Momento tetrabrick

Para terminar un “fantástico” día, descorchamos nuestro vino “gran reserva” de 2 litros en tetrabrick que habíamos comprado para ocasiones especiales y después de cierta euforia... pasamos una noche de lo más tranquila, no nos enteramos de nada...

Por la mañana salió el sol, los pájaros cantaban y todo empezó a ser normal!! Qué os parece este sitio para desayunar?

Nuestra mesa de desayuno










Después de la operación “recogida de ropa”, continuamos ruta a Byron Bay. Nos pareció un sitio donde el movimiento flower power (hippie) estaba muy presente, vimos coloridos murales hechos por artistas callejeros y bastante gente colgada todavía en los 60. Es un lugar muy turístico con restaurantes, tiendas de souvenirs, de ropa de marcas conocidas y con muy buenas playas para hacer surf.

















Después de visitar esta ciudad, decidimos continuar e ir a dormir a Palm Beach. Allí estuvimos en el Camping Park Palm Beach, un lugar bastante barato. Pagamos entre todos 46 $ (36 € apróx.) por las 2 noches (enganche de luz y agua incluido), tiene piscina y está a escasos 100 metros de la playa. También hay al lado un McDonald’s, donde no hace falta consumir para tener internet gratis…

Por la noche dimos un paseo super tranquilo por la playa, algunos de nosotros mojándonos los pies con las olas... Desde la playa veíamos el juego de luces que desprenden los altos edificios de Surfers Paradise.

Al fondo edificios de Surfers Paradise










Por la mañana encontramos lo que llevábamos tiempo buscando en Australia y que todavía no habíamos visto, un mega outlet a la americana!!! Y encima tienes que pasar por delante para ir a Surfers Paradise, por lo que nos pillaba de camino. Se trata del Outlet Harbour Town, allí había todo tipo de tiendas con buenas ofertas. Nos encontramos con algunos locales que tenían tanto material rebajado y tal desorden, que nos fuimos sin comprar nada y encima agobiados de ver tal infinidad de letreros de “sale”, “rebate”, “clearence”, “50%”, “60%”, “70%”… uffff… que estress!!!!!  En este centro comercial todos hicimos negocio y encontramos cosas muy rebajadas!!! Recomendable 100x100!!!

Dentro de este outlet hay un expositor de información turística, en él puedes encontrar muchos vales de descuento de tiendas, restaurantes y de atracciones turísticas. Allí fue donde compramos con un 20% de descuento las entradas para el Australia Zoo, a parte del descuento que nos hicieron con el ISIC (carné de estudiante)!!!

Una vez concluidas las compras nos fuimos directos a Main Beach, muy cerca de Surfers Paradise, escogimos la opción de dormir en el Main Beach Tourist Park porque está bien situado y las instalaciones tenían todo lo que necesitábamos.

Main Beach











En el mismo camping alquilamos tablas de surf a mitad de precio porque hacen este descuento los miércoles. Equipados y con protector solar hasta las cejas, nos fuimos en busca de olas!!!


Bajo la supervisión de Victor, hicimos el calentamiento a lo largo de la playa, más tarde comenzamos con nuestras primeras lecciones sobre la arena, parecía más o menos sencillo, remas cuando viene la ola, agarras con fuerza la tabla y cuando notas que te lleva el agua de un salto te pones en pie. Hicimos varios intentos en seco y ok, teoría aprobada, pasamos a la práctica…




Momento Beach Boys


Uffff… esto es más complicado de lo que parece a simple vista, tienes que controlar varias fuerzas y tu propio equilibrio en un medio que se mueve. Es bastante adictivo y pasa el tiempo sin darte cuenta, también es fácil recibir golpes por todos sitios… El único que consiguió levantarse varias veces fue Victor, alcanzando el Da una vez a ponerse de rodillas, el Cipri a dejarse las costillas en carne viva y la Ro a salir del agua magullada con un tablazo en la nariz y otro en la pierna, mientras la Sheila tranquilamente tomaba el sol…

La experiencia nos gustó mucho, pero las olas estaban bastante “desordenadas”, venían muy seguidas y sin un ritmo fijo, por lo que para gente inexperta como nosotros era todavía más complicado. Al cabo de cinco minutos de estar tumbados en las toallas comenzamos a notar los efectos del surf por todo nuestro cuerpo, y no nos referimos a un crecimiento desmesurado de los músculos abdominales… si no a un dolor y un cansancio bastante fuerte en los hombros, brazos y abdomen que nos hizo tener agujetas durante un par de días.

Después de descansar visitamos Surfers Paradise, estaba a unos 25 minutos andando del camping, no se hizo pesado. Esta ciudad está orientada al turismo, siendo su principal fuente de ingreso, por lo que hay multitud de opciones de ocio y de shopping. Hay muchos edificios altos y se ve todo muy cuidado, limpio y seguro, destacaríamos el paseo marítimo.
















Victor después del duro día de surf
Compramos en el supermercado Coles, este centro es más barato que el Woolworths y sus productos de marca blanca están bastante bien. En el Coles es donde hicimos el descubrimiento de lo que sería parte de nuestra dieta diaria durante la estancia en Australia, se trata del famoso “cerdopo” (bautizado con ese nombre por nosotros), es un embutido mezcla de cerdo y pollo. Es económico y lo puedes comer de diferentes formas (sándwich, a tacos con la pasta, frito a la sartén, al micro con queso fundido por encima, en tortilla, en ensalada…).

Esa noche compramos para cenar carne, nos lo pedía el cuerpo!!! Cipri fue el responsable de lo que sería nuestra primera barbacoa. Hemos notado muy diferente el sabor de la carne aquí, es mucho más sabrosa y en comparación al resto de productos que tienen, no es cara. Otro dia probamos los espaguetis de nuestro profesor particular de surf.

Cipri con toda la carne...










Menudo plato se comió la Shei!!!










En nuestra próxima entrada comenzaremos hablando de uno de los sitios que más nos ha gustado de este país, se trata del Australia Zoo

Este zoo era propiedad de Steve Irwin, el cazador de cocodrilos más famoso del mundo. Se hizo muy conocido por su programa de televisión que nosotros seguíamos por tv3. Era único en la forma de transmitir su entusiasmo en lo que más le gustaba, los cocodrilos.

Steve falleció el 4 de septiembre de 2006 a la edad de 44 años por la picada de una raya látigo, conocida también por raya gigante, ya que puede llegar a los 5 metros de longitud y a pesar 600 kilos!!!



5 comentarios:

  1. Simplemente GENIAL!Sta entrada m a encantado!

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  2. A verrrrrrr, como a vosotros, unos viajeros empedernidos os pasan estas cosas??? Me he tronchado de risa... y lo bien que quedais con las "tablitas" de surf, ¡vamos pero si es lo que habeis hecho toda vuestra vida!!. Esta entrada no tiene desperdicio.
    Petonets.

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  3. Muy buena la entrada, de hecho había cosas que ni me acordaba. Gracias por esos buenos ratos!!!

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  4. la siguiente entrada???? jajajaja besitos guapos Rosa

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    1. Si tenemos internet... mañana día 12 probablemente, por cierto, hablaremos también de la excursión a Fraser Island!!!

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